martes, 23 de diciembre de 2008

Un cuento de navidad

La navidad de Sisi


Estaba conectada desde las tres de la manaña y hacía exactamente veinte horas que no despegaba su culo del asiento. Recorría la web de fotolog a fotolog, firmando todos y cada uno de los post que encontraba. Dejaba una dedicatoria sencilla pero bien visible: " Muy bueno. Felicidades y que sigas con lo tuyo. Sisi."
La madre estaba preparando los platos para esa noche. A casa vendrían los abuelos y el tío Norberto. Su hermano estaba tirado en su habitación jugando con la play y su padre hacía horas que luchaba con el carbón y el asado en la parrilla.
La familia de Sisi era una familia normal, clase media acomodada. No muchos lujos pero de un buen pasar.
A medida que dejaba sus comentarios en los flogs, Sisi respondía los que recibía en el suyo. Su última foto era con su mejor amiga, Carla, abrazadas en la plaza del pueblo con la imágen de la iglesia como fondo. La foto parecía no decir nada pero se podía ver el abrazo cariñoso de CArla sobre los hombros de Sisi y esa expresión compartida de provocación: la lengua afuera y un ojo cerrado.
Sisi no hacía mucho que había entrado en ese mundo del ciberespacio, del fotolog. Carla le había mostrado un link que había encontrado por casualidad en una de sus tantas búsquedas nocturnas, donde se veían ellas dos como parte de una foto sacada en el pueblo por un visitante ocacional. De ahí salió la idea de mostrarse al mundo y provocar algo en alguien que seguramente no conocerían.
La madre de Sisi la llamó desde la cocina pero Sisi tenía los auriculares puestos escuchando Los redondos. Su hermano tampoco había respondido al pedido de ayuda de su padre. Ambos estaban absortos en sus ocupaciones virtuales.
Suena el timbre. Los abuelos y el tio Norberto llegaron para la cena. La mesa ya está servida y su madre golpea la puerta de la pieza para que baje a comer. Sisi responde su último comentario y deja la máquina prendida. Baja corriendo las escaleras y saluda rápidamente a sus abuelos y tio. Su hermano ya está sentado a la mesa comiendo la entrada fría, mientras el padre arrima una bandeja de chorizos.
La cena transcurre sin sobresaltos. El tío Norberto comenta de los últimos resultados del fútbol y su padre ensaya una especie de argumentación sobre la suerte y el destino del campeón del torneo. La abuela y su madre sirven presurosas los platos con los dulces y las frutas secas. Las sidras comienzan a correr de mano en mano. Su hermano es el encargado de abrirla: es una tradición familiar materna.
Sisi no deja de pensar en los mensajes que debe estar recibiendo y en la pila de comentarios que deberá responder. Esto del fotolog es un trabajo extra.
Las doce horas están cerca. Sus padres junto a los abuelos y el tío empiezan a brindar por el año terminado, por la navidad, por el próximo año. Siempre acostumbran brindar por todo en esta fecha. Es que recién el próximo año, para navidad, se volverán a encontrar.
Sisi piensa en lo extraño que es esto de las fiestas familiares de fin de año. La recursiva hipocrecía del beso y el deseo con aquellos que hace tiempo no se ven. Las fiestas familiares son un trastorno para Sisi.
Prefiere conectarse al mundo a través de su compu y mantener una buena charla con sus amigos virtuales.
Los bomberos accionan la sirena para marcar las doce en punto de la noche. Todos se abrazan y saludan, inclusive Sisi. En plena celebración suena el timbre. Sus padres se miran asombrados: ¿quién podrá ser?
La madre abre la puerta y vuelve a la habitación con cierta cara de asombro. Dice que afuera hay muchas personas que están preguntando por Sisi. Los abuelos, el tío Norberto, su hermano y su padre la miran asombrados.
Muchas personas buscando a Sisi, en plena navidad?
Sisi también estaba asombrada. Se acercó a la puerta y vió no muchas personas sino una multitud que la saludaron ni bien asomó su rostro por la puerta. ¿De dónde habían salido? ¿Cómo consiguieron su dirección?
Todos la saludaron. Conocían su nombre. Parecía que Sisi tenía un ejercito de amigos que se juntaron esa noche de navidad para saludarla. Sisi levantó su mano en gesto de saludo y se metió enseguida en su casa. Estaba realmente asustada. Tanta gente en su calle, fuera de su casa y que ni siquiera ella conocía, la había pasmado de miedo.
Sus padres y abuelos la seguían mirando con asombro. Su hermano movía la cabeza en gesto negativo. Entonces Sisi comprendió su error. Subió las escaleras y entró en su habitación y desconectó la computadora. Como un acto de magia los miles de amigos que estaban fuera de su casa desaparecieron.
La puerta sonó otra vez. Su madre la llamaba para bajar a comer. Los abuelos y el tío Norberto ya estaban en la mesa esperándola para comer en noche buena.

martes, 9 de diciembre de 2008

Miradas y lecturas


Una forma de leer nuestro espacio


Los situacionistas, una de las últimas vanguardias artísticas de la década del ´60, tenían la teoría de que los que vivimos en las urbes, estamos atrapados en circuitos de circulación que condicionan y controlan nuestra percepción del mundo y nuestro estado de ánimo. Circuitos de circulación que se conforman con los recorridos que habitualmente realizamos, día a día, sin prestar atención: de la casa al trabajo, del trabajo a la casa; "la vuelta al perro" en el centro mercedino; el paseo dominguero al parque municipal y la carabana interminable en las horas pico de coches que van y vienen al sector nuevo del parque municipal; los que trotan y corren durante las mañanas y por la tardecita a lo largo del acceso por calle 40 - desde la rotonda de la 1 hasta la ruta 41 -; y siguen los circuitos.

Lo que estos artistas postulaban era romper con esos circuitos mentales que se trasladaban a la geografía, al territorio. Romper por medio de lo que ellos denominaban "La deriva". En qué consiste esto? En dejarse llevar por lo que nuestros pies hagan sin pensar, fijando un punto de llegada o simplemente salir sin rumbo fijo y sin tiempo. Así, los situacionistas de París se realizaban citas en lugares determinados pero sin camino prefijado. Salir a la deriva, sin rumbo, sin un mapa que nos marque el camino. Romper con los circuitos de circulación y el sentido impuesto por el territorio. ¿Quién dijo que el camino más directo es el que va en linea recta? ¿Por qué no perderse en los circunloquios del pensamiento y avanzar? Salir de lo cotidiano y descubrir el mundo que nos rodea.

Un ejemplo interesante de esta sumisión mental que nos lleva nuestra vida consumista es la película Wall -e. Los terrícolas que vivían en la nave Axioma eran, luego de 700 años en el espacio, unos obesos y autistas que vivían en constante conexión mediante una pantalla y no tenían interacción con su medio ni con semenjantes en forma directa, corporal. Muy buena película Wall - e. Como toda la ciencia ficción, anticipatoria y muy filosófica - por más que a algunos les pese -.

Guy Debord era uno de los referentes más importantes de esta vanguardia artística francesa de los años 60. Su vida es otro interesante ejemplo a seguir. Pero más adelante hablaré de el.

Mientras tanto, dejo una imagen tribial, casi insignificante de un detalle ornamental en una fachada de una casa antigua de Mercedes. Una pequeña joya que pasa desapercibida para la mayoría de los mercedinos que transitamos todos los días por las calles de la ciudad.

¿Dónde está esta ornamentación? Una pista: sobre calle 27 a escasas cuadras de la plaza San Martín.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

Algunas apreciaciones sobre la escritura


Sobre los modos de la escritura: poniendo el cuerpo a la escritura


Este año he trabajado sobre un proyecto de taller de escritura que denominé "Taller de Escritura Experimental y vivencial", que se dictó durante dos trimestres en la Unión de Educadores Bonaerenses de Mercedes.

El taller intentaba incentivar la creatividad y la escritura a partir de ejercicios de motivación apoyados en técnicas de diversa índole: desde el mimo y el clown hasta la fotografía y el periodísmo.

El primer ciclo trabajé sobre el cuerpo y las acciones corporales a partir de las cuales salían trabajos de escritura interesante. Partiendo de la interactividad entre los participantes del taller y mediante el juego se armaban algunas consignas de escritura o pautas de escritura: encabezados de frases o finales de textos.

También se trabajó con material periodístico y con actualidad. Así la problemática campo-gobierno se vio reflejada en la producción de textos.

Otro tópico trabajado fueron las experiencias de vanguardia en la poesía dadaísta y surrealista: escritura automática, "Cadáveres Exquisitos", collages de textos.

En el segundo ciclo el plantéo giró en torno de profundizar la estructura de los textos. Aunque no se pudo plasmar muy bien en los textos producidos.

¿Qué busca un escritor en los talleres literarios o de escritura?

¿Cuál es la motivación central para participar de un taller?

¿Qué debe brindar el taller a sus participantes?

Estas preguntas quedan como un primer acercamiento al dictado de un taller de escritura que intentaré ir respondiendo desde la práctica del taller y desde la experiencia.

Este 2008 es el cuarto año consecutivo en que doy un taller de escritura y donde la experiencia me fue permitiendo armar un conjunto de herramientas didácticas para dar respuesta a lo que cada uno de los participantes iba buscando del taller.

Con la premisa de no influenciar en el estilo de cada uno de los participantes y de no corregir salvo en la coherencia y coheción de los textos, se fue incrementando el nivel y la calidad de la experiencia.

Uno va creciendo con los participantes y con el dictado del taller mismo. Elaborar un camino de experimentación con la escritura es un objetivo que se planta de aquí para adelante. Trabajar no solamente en la trama y las historias sino en la corporeidad misma de la escritura. Incursionar en la grafía y en las formas de los textos. Buscar nuevos caminos de expresión más allá o más acá del sentido de las palabras y su conjugación.

Un desafío para el próximo año.

martes, 28 de octubre de 2008

Pequeño relato

A cara de perro


A cara de perro midieron sus cuerpos, tomaron distancia, marcaron los límites del territorio que a cada uno le correspondía. A cara de perro tomaron los recaudos necesarios, se provisionaron de lo imprescindible y ocultaron todo lo que el otro pudiera observar. A cara de perro escucharon los sonidos que el viento traía desde lejos, los olores que la brisa transportaba, desdibujando el paisaje llano en una mancha vizcosa que parecía multiplicarse en capas superpuestas.
El sol hacía su trabajo al medio día y a cara de perro no dejaban de sacarse los ojos de encima, los cuerpos rígidos, las manos inquietas y alertas.
Parecía un duelo que tensaba el aire que atravesaba la distancia entre ellos dos. Nadie, salvo uno, podía palpar esa densidad, esa pesada quietud de los segundos que corren lentamente entre un tic y un tac.
A cara de perro se pararon uno frente al otro, acortando las distancias con cada gota de sudor que caía de sus mejillas, acercándose pausadamente, casi imperceptíblemente en cada palpitar.
El mar del tiempo agitaba sus costas.
Dentro de cada uno subia y baja la marea de la adrenalina; con cada bocanada de aire que entraba en sus cuerpos el mundo se deshacía en miles de partículas de monóxido de carbono.
El silencio estremecía los oídos que pugnaban por asirse a un mínimo murmullo. Todo era silencio.
Ambos permanecían inmóviles, a cara de perro, aguantando el parpadéo para no quitar ni un segundo los ojos sobre los del otro.
A cara de perro continauron toda la tarde, toda la noche, toda la vida.
Nadie supo cuándo ni cómo, pero nada sucedió a esa impostura de la postura más abyecta. Tanto que si no fuera por este que lo cuenta, nadie los hubiera visto. Nadie se hubiera percatado. Sin embargo, continúan ahí, parados, fijos, estáticos, inquietamente quietos. A cara de perro. Recortados.

sábado, 4 de octubre de 2008

martes, 23 de septiembre de 2008

Recordando a un gran artista (2)



Octimio Landi


En la década del `60 su participación en salones y exposiciones es abrumadora. Se citan algunos de ellos: XVI Salón de Arte de Mar del Plata; Salón Anual de SAnta Fe; Centro Cultural "General SAn Martín" de Capital Federal.

En Mercedes expone junto a otros artistas locales: "Pintores y escultores Mercedinos" en 1964; "Primer Salón Anual de Artes Plásticas" en 1966; exposición en la Cámara Económica Mercedina en la semana Argentino-Francesa en 1977.

En 1978 junto a los pintores Cristina Cordal, José Roggero y Eduardo Godino, integra la muestra "Cuatro mercedinos en Carlos PAz" con el auspicio de la dirección de cultura de dicha localidad.

En 1978 también incursiona en el cine integrando el "Grupo Cine Septiembre" y participa de la realización de la película "Cuarto Reino" dirigida por Jorge Citrángolo. Participa de la realización de la película "Cristna Dawson Paz" con dirección de Hernán Guinot.

De 1969 data el cortometraje "Creación", película dirigida por Jorge Citrángolo con guión de Rolo CApaccio y participación de Herán Guinot. En esta película se muestran los trabajos escultóricos de Landi.

Su obra no se ata únicamente a la pintura y la escultura. Octimio Landi también realiza una serie de grabados y de cerámicas. Realiza las ilustraciones de las tapas de los libros del escritor Raúl Ortelli " Más allá del Paraíso" (1972) y " Ahí van las brujas" (1975).

En los ochenta experimenta con trabajos realizados por una sobrina que integran la serie "Loana", pinturas sobre dibujos infantiles.

Landi exploró sobre la realización de máscaras y pequeñas esculturas hechas con desechos industriales, bronce y cobre y partes de motores. De aquí surge la serie " Seres de bronce" - miniesculturas con piezas de grifería-.

Su espíritu creativo nunco lo abandonó. Landi proyectaba y vivía arte. Sobre los últimos años de su vida, la producción artística de Landi se centró en la realización de bocetos y la plasmación de varios murales que se emplazaron en el barrio donde vivió por décadas hasta su muerte.

miércoles, 17 de septiembre de 2008

Recordando a un gran artista (1)


Octimio Landi: 3 de septiembre de 1920 - 1 de noviembre de 2005



Nació un 3 de septiembre de 1920 en la ciudad de Mercedes. Hijo de Francisco Landi - inmigrante italiano- y Juana Florio - argentina -. Octimio es el menor de ocho hijos. Nacido en el seno de una familia humilde, no tuvo la posibilidad de tomar clases de pintura y todo lo que fue adquiriendo lo hizo de manera autodidacta. En su juventud forma parte del "Círculo artístico de Mercedes" y en octubre de 1949 realiza su primera muestra colectiva "Primera exposición local de pintura, dibujo y escultura", con el padrinazgo de Juan José Marín. Landi presenta dos esculturas en yeso de las que se destaca "Quita".

Participa en numerosas muestras en localidades vecinas y en 1952 lo hace en la "Primera exposición regional de pintura y dibujo y escultura".

Landi forma parte de diversos grupos e instituciones del quehacer cultural mercedino: "Biblioteca Sarmiento", "Casa del Pueblo" y el "Museo de Ciencias Naturales Carlos Ameghino". Encomendado por esta institución realiza un monumento homenaje a Florentino Ameghino que es inaugurado el 23 de octubre de 1955 y se emplaza en el Parque Municipal, en cercanías del Río Lujan.

Para 1956 realiza junto a colaboradores la "Exposición de Arte Precolombino" en la Biblioteca Sarmiento, exhibiendo reproducciones de piezas cerámicas indígenas, que fueron donadas al Museo de Ciencias Naturales.

En 1958 participa con una escultura policromada en el "V salón Estímulo" de la provincia de Buenos Aires. Al año siguiente obtiene el premio adquisición con una escultura en yeso "Maternidad".

Para el mismo año forma parte del grupo artístico "Escalera" que nuclea a plásticos mercedinos como Osvaldo Martínez, Domingo Carella, Juan Villareal, Roberto Ortíz y Josefina Zamudio. En 1961 el grupo expone en el Salón de Artes Plásticas de La Plata y para noviembre del mismo año en el Palais de Glace de Capital Federal. De esta época es su escultura "Tango".

1961 también participa del 39º Salón de Arte de Rosario con su escultura "Buhos y lechuzas" con mención honorífica.

martes, 26 de agosto de 2008

Re-flex


Brillo



X

X

X

Ojo

X

X

X

X

Pop

Y

Y

Y

Y

lux

Y

Y

Y

Y

Z

jueves, 14 de agosto de 2008

Textos taller escritura: Angie


La Comunión



A pesar de ser tan diferentes unos con otros, ese día pudieron coincidir en todo!

Primero en bañarse sin rezongar. Luego en quedarse bastante quietos, sobre todo los varones, que siempre están trepándose a los árboles; no la molestaban a Roberta, que es tan callada la pobre!

Y por último, pudieron calzarse los zapatos de los domingos, ellos, que diariamente andan descalzos o en alpargatas.

Ah! Casi me olvido. Los tres pudieron recitar el padrenuestro al unísono como se los hizo recitar la abuela. Vieron? Todos podemos coincidir "a veces", a pesar de ser tan diferentes unos con otros.

viernes, 1 de agosto de 2008

Texto taller escritura: Lydia


Volver al pasado

Es una tarde otoñal plácida y serena. Salgo a caminar y me dejo llevar por el placer que da el calor del sol en esta estación. Las hojas de los árboles están cayendo, vistiendo las veredas y las calles con una mezcla de colores: amarillos, rojizos, verdosos. La brisa acaricia mi mejilla y siento que al respirar todo mi cuerpo se libera logrando una completa relajación.
Camino mirando las casas de mi querida ciudad y de pronto una de ellas atrapa mi atención. Es una edificación antigua, sencilla. Elevo mi vista hacia su parte superior y observo una escultura arquitectónica. ¿Cuántos años tendrá esta casa? ¿Quién la construyó? ¿Quiénes fueron sus primeros habitantes? Me dejo llevar por mis pensamientos.
Qué hermosa figura, cuanto tendrá para contar. ¿La habrán elegido para ser observadora de vivencias o vigía de los acontecimientos por venir? Si pudiera preguntarle cómo era ese lugar cuando ella fue creada. ¿Habrá sido la única propiedad en ese lugar? ¿Cuántos casamientos, nacimientos, navidades disfrutó? ¿Estaría sola o habría otras viviendas ofreciéndole compañía? Seguro que un hermoso jardín estaría a la entrada, acorde con la importancia de su fachada.
Mira hacia el este, ve todos los amaneceres desde hace muchísimos años. Ahora está rodeada de casas y el cemento es la base, pero sigue ahí, fiel a su destino. Su creador lo quizo así y yo, por un momento, traté de imaginármela, volviedo al pasado.

martes, 22 de julio de 2008

Para una canción

Vibra


Vibra el corazón
con desolada compasión
que en tus manos
la ración de un
pedazo de ilusión

No te deje ver
lo que a tu lado está.
Vibra con ardor
la más cálida intuición

Solitario,
desnudo y aplacado
buscas la canción
que te quite
ese dolor.

Sabes que al mirar
tu rostro mustio
en el reflejo
de ese espejo
mentiroso
los años no te van a abandonar
aunque tu quieras ocultar

La mirada triste
de tus días
grises

Obsecionada compasión,
deja ya de lamentar
tu angustiada melodía
en los oídos de los demás.

Esgrime una sonrisa
con lo mejor de tu repertorio
y desanda los caminos
hasta el dolor que idiotiza.
Mejor hazte una brisa
y esfúmate de prisa
extraña
inquieta
desilución.

jueves, 10 de julio de 2008

Se viene, lo que... se viene


Taller experimental de escritura: los textos de los alumnos.


Terminado junio se cerró el ciclo de 12 clases del taller de escritura experimental y vivencial, dictado en el sindicato de docentes U.E.B, de la ciudad de Mercedes (B).

Los participantes, con sus trabajos, integrarán una publicación que dará cuenta de lo trabajado durante el taller.

Próximamente se iran publicando los textos en este Blog, para deleite de quienes quieran disfrutar de escritos interesantes y ocurrentes.

Falta poco. Estamos editando.

jueves, 26 de junio de 2008

Swordfish fishin in feet


De what´s hablas, persico?


Quejas, quejumbrosas.

Ridículas pretensiones de salir por TV.

Fotolog, logos, logicus.

Miradas se pierden en cada ventanita.


What´s happen chamigo?


It´s de Oringo

Suelto, risueño.

CAmina vestido - no Versacce -,

Busca alimento, nada rojo.


Best: colorado, darlyn

Not de cigarretes, si lo glam

de barrio norte, Vistess?


Whst´s a comunism?

= ismos, entreverados; enervados. ¿Va con H?

SIDA - UHV.

MAS.


¿What´s?

lunes, 23 de junio de 2008

Dis-par-en

Insoportable afiebramiento me llena la cabeza de palabras vacías, palabras que sin un sentido entero, más bien disperso, dislocan los razonamientos de mi mente afiebrada; desfile interminable de repeticiones interminables como un eco que se diluye y se diluye y se diluye y se diluye infinitamente hasta alcanzar la automática repetición de un desfile interminable de repeticiones interminables, casi impenetrable desfile que sin un espacio de respiro, espacio necesariamente necesario para diluir la interminable repetición de palabras manequen, insoportablemente afiebradas, insoportablemente encadenadas a un interminable desfile de repeticiones interminables que no conocen fin posible hasta el punto irreparable que se cuela entre las bambalinas de las pasarelas de discursos interrumpidos única y sencillamente por el punto y aparte.
Punto y aparte que interrumpió única y sencillamente en las bambalinas de las pasarelas de los discursos que no conocen otro fin posible, dado las repeticiones interminables del interminable desfile de palabras encadenadas necesariamente, insoportablemente afiebradas en palabras manequen que se diluyen interminablemente en una repetición interminable sin un necesariamente necesario espacio de respiro, de un desfile casi impenetrable, de interminables repeticiones de desfiles interminables de una automática repetición que infinitamente se diluye y se diluye y se diluye y se diluye en un eco de interminables repeticiones de un interminable desfile de mi afiebrada mente de razonamientos dislocados, más bien dispersos, sin un sentido entero de palabras vacías que llenan mi cabeza afiebrada.

lunes, 26 de mayo de 2008

Escritos pasados

Desoigo y oigo a la vez los repiqueteos de las palabras insistentemente lanzadas contra mis oídos que desoyen y oyen las palabras repiqueteando una y otra vez contra ellos mismos, sin parar ni dejar de parar, constantemente, insistentemente arrojadas contra mis oídos que son repiqueteados por las palabras insistentemente insistentes, repiqueteras y danzarinas.
Una y otra vez desoigo y oigo su clamor injurioso y antojadizo contra mis dos oídos, repiqueteados por las palabras insistentes que se arrojan con furia violenta hacia el vacío cóncavo de mis oídos desoídos, de mi mente afiebradamente repiqueteada por las palabras injuriosas, antojadizamente kamicases, irreverentemente interminables y violentamente encadenadas unas a otras, interminablemente ligadas en discursos interrumpidos por un único punto, inevitable y necesario punto de descanso para mis oídos que desangran por el repiqueteo insistente e insidioso de las palabras antojadizamente arrojadas hacia ellos, necesariamente desoídas por el interminable discurrir de los discursos interminables que se acaban en un simple y sencillo punto de intersección, límite entre unos y otros, necesariamente separados, cortados, escindidos por este punto y aparte que imprescindiblemente divide dos estrofas por un simple y necesario punto y aparte.

sábado, 24 de mayo de 2008

Jugar el juego Octavio fiorelli
Jugar.
Jugar un juego. Jugarse.

Jugarse el pellejo. Jugando.

Jugando a las escondidas.
Punto y coma el que no se escondió se embroma.

Piedra libre. Juego libre.
Libertad.

Sin ataduras, sin reglas, sin normas. ¿Qué juego propone un juego libre?
Juego: reglas, reglamento.
Reglas: condiciones, encasillamientos, secuencias, ordenamiento, orden social, socialización, civilización: occidental: cristiana: capitalista: sistema.
¿Cuántas acepciones tiene el verbo jugar? ¿Cuántas acepciones tiene la palabra juego?

Rayuela.
La rayuela es un juego, es una reglamentación, es un acondicionamiento del cuerpo, es un ordenamiento del espacio, es un encasillamiento del ser en individuo: entretenido, divertido, pero encasillamiento al fin; un alegre encajonamiento de las pulsiones, un
ponerle orden a un caos.

Tierra. 1,2,3,4,5,6,7,8,9 Cielo.
Entre la tierra y el cielo, la vida.

Entre la tierra y el cielo: números, matemática, lógica, razón, razón de ser. Todo tiene una razón de ser. Nada puede existir entre el cielo y la tierra que no tenga un número, una cifra, una razón, un ser: macho, hembra, heterosexual, homosexual, lesbiana, bisexual, transexual, hombre, mujer, blanco o negro o toda la escala de grises, 1,2,3,4,5,6,7,8,9, y las infinitas combinaciones posibles – agregando el CERO también, aunque el cero es una excepción que confirma la regla, es la representación de la nada – 1,2,3,4,5,6,7,8,9, nada escapa a esta lógica ascendente,
ordena
Pero:
¿Se puede vivir sin reglas? ¿Se puede vivir sin jugar?
La pregunta sería ¿quién pone las reglas?

Jugar el juego.
Vivir la vida.
Este juego de palabras se acabó aquí.
Este texto participó en el proyecto Rayuela
del artista Camilo Guinot.

sábado, 3 de mayo de 2008

la evolución ciclópea de la bicicleta (III)


Del proceso fortuito de la autonomía vehicular:



Inmersos en el espíritu de la época, en pleno apogéo de la era industrial, se produjeron diversos descubrimientos que apuntalaron la vieja añoranza del desplazamiento sin ayuda animal. En tal sentido los inventores aplicaron sus conocimientos por conseguir el vehículo que permitiera la movilidad de hombres sin esfuerzo y con autonomía de los animales.

Comenzaron a experimentar con la energía eólica, con la fusión y la combustión de elementos minerales, con el aprovechamiento de las transformaciones de los estados naturales de ciertos elementos como el agua. Estos experimentos implicaban grandes inversiones y movilizaban a una gran cantidad de intereses. De hecho la creación del ferrocarril ocupó y en cierta medida suplió a la industria de la construcción de navios en pos del hierro y el carbón para las vías férreas y las locomotoras. Pueblos enteros crecieron bajo la égida de la industria automotríz y otros tantos miles sucumbieron en cada recambio tecnológico que supuso la implantación del ferrocarril por sobre los carruajes, los autos y camiones por sobre el ferrocarril y en un mañana ... ¿el avión por sobre el automóvil?

Allá por 1790 un francés de nombre De Sirvac construyó el primer vehículo de dos ruedas propulsado simplemente con el envión alternativo de las piernas de quien lo usara. Similar en apariencia a montar un caballo,, este primordial y primitivo biciclo tuvo el modesto propósito de ser un simple juego para divertir a los nobles de la corte del rey Luis XV, mientras en las calles de París se cocía a fuego moderado la revolución.

viernes, 25 de abril de 2008

La evolución ciclópea de la bicicleta (II)


Continuación


Antiguamente había tratado de establecer los records en las pruebas olímpicas de velocidad y larga distancia pero siempre cayó en la cruda realidad de que jamás podría ganarle a un corcel, salvo que éste estuviera atado por los pies y quedara así inmovilizado.

Siglos de carrera forzada, trotar y correr largas distancias entre batalla y batalla, el hombre adquirió un secreto placer por recorrer y observar el paisaje, admirar el espectáculo de la naturaleza en todo su esplendor y poseer todo aquello que sus ojos abarcaban.

Portando escudos, espadas y lanzas, los griegos, atletas consumados, dieron pruebas de la resistencia humana. Basta recordar la excursión de Alejandro Magno por toda Asia menor hasta las puertas de China con su ejercito de bravos apolos y expertos luchadores. Musculosos varones que quemaban el pasto donde pisaban de tan rojos que tenían sus pies trotamundos.

La mitología griega cuenta las hazañas de Hermes, la divinidad de los pies alados, que se reflejaban en los esforzados correos humanos que atravesaban la geografía árida y escarpada de Grecia para luego recibir como premio de los mensajes que llevaban la muerte o la alabanza, según la noticia.

A pesar de las derrotas que la realidad le impuso al atrevimiento del hombre por superar sus loímites físicos, la insistencia y la tozudéz fueron y son características innatas de la condición humana. Llevó siglos de ensayo hasta que en diferentes ámbitos se comenzaron a vislumbrar los avances tecnológicos que permitirían romper las barreras de la naturaleza.

martes, 1 de abril de 2008

La evolución ciclópea de la bicicleta (I)


Del origen de la motivación primigenia


Desde tiempo inmemorial, el hombre se vale de sus pies para andar y rodar en la tierra.
Luego, dando rienda suelta a su pericia, tomó sobre sus brazos cuanto animal andaba suelto por ahí y trató de desplazarse en él. La experiencia se basó un ciento por ciento en la prueba del ensayo y error. Así montó lagartos, avestruces, hienas, cervatillos, hipopótamos, elefantes, monos, cebras, chanchos, caballos, perros y gatos. No hace falta redundar en los fracasos, que fueron muchos, pero de tanta experimentación adquirió, el hombre, la destreza de dominar a la naturaleza salvaje de los animales y sacó provecho de cada una de las especies que confrontó.
Pensar que todo fue fruto de la intención vanal de descansar en vez de gastar energías en el traslado de sus tribus.
Por aquellos años era habitual ver largas caravanas de hombres y mujeres desplazarse por los territorios selváticos, sábanas y llanuras, en busca de un hogar transitable. Siempre nómade, el impulso motor de semejante travesìa era la búsqueda de alimentos, abrigo y cuanto fuera necesario para subsistir.
El caballo y su relación con perros y gatos fue el saldo positivo de la experimentación y juntos recorrieron un largo camino de milenios hasta el momento en que ya no vastó la ayuda animal y el bichito de la curiosidad picó e hizo centro en la vanidad de moverse más rápido que cualquier animal, sin ayuda de estos.



Este texto pertene a un proyecto de libro inspirado en la inquietud

del artista mercedino Octimio Landi. Uno de sus últimos proyectos

era el abordaje del tema bicicleta, a raíz de una bicicleta que poseía

de uno de sus hermanos, la cual intentó restaurar y exhibir en el

predio del circuito ciclístico de Mercedes B.

A la memoria de semejante ser creativo están destinados estos textos

que tomaron el desafío levantado por el artista antes de su muerte.

Octavio Fiorelli

sábado, 8 de marzo de 2008

Predilección por el amarillo huevo

Pregunta a tus conciliábulos,
en ocasión de estar ausentes
entre bambalinas lúgubres,
qué es eso de estar inertes.

Balbuceando siniestros planes
que regodean las fantasías ajenas
de los pregoneros en pos
de un saludo manifiesto.

Descubiertos sus rostros
por el rojo de sus ojos,
miradas esquivas se entrelazan
en pestañas cerradas de condescendencia,

ocultos instintos destruyen
los últimos resabios de
un día hermoso como
un sol enajenado por los filtros.

Cuatro son los movimientos
dentro del espacio añejo:
inclinado hacia el rojo,
opuesto al azul, verde por el centro,
nogro por los bordes,
estribos plateados te contienen
en un gris de no dar más.

martes, 19 de febrero de 2008

Sobre el prosaico saber de las rimas

De Quevedo a Góngora, de Elliot a Whitman, de Borges a Gelman





La rima se presenta - ba, como la regla ineludible en la poesía clásica. La métrica, la cantidad de sílabas que componen el verso, era la marca de origen, el quantum clasificable.

Con las vanguardias ese orden se quebró y la poesía goza de una libertad inigualable. Despojada de la preocupación por la sonoridad, la búsqueda de sinónimos con terminaciones combinables, la puntillosa marcación de la métrica, la poesía se atreve a romper hasta con su propia esencia.
Los poetas contemporáneos no fijan las prioridades en la forma del poema sino en la originalidad, la espontaneidad, la traslación sin mediaciones entre sus pensamientos-sensaciones-vivencias y las palabras que brotan como agua de manantial.
No existe una preocupación mayor por la rima. Hoy, gran cantidad de poetas y de poesía se arrojan a la vista de los lectores - si es que quedan algunos con vida para la poesía - sin escrúpulos ni medias tintas; sin importar siquiera si serán entendidos, asimilados, leidos o escuchados.
Como un capricho, cuasi una rebeldía contenida, los versos han caducado; se han retirado hacia la morada del recuerdo, de lo pasado de moda, de lo out.
Escribir poesía es un delirio de condenados al fracaso. La más obtusa provocación contra el régimen establecido de la novela. El poeta es un kamikase que se encomienda al cielo de los excesos y arremete contra todo lo establecido. Por que piensa que no existe otra posibilidad de ser vivida. Por que no cabe más que saltar al vacío para no caer. No arrodillarse ante las bendiciones de la moda, del mercado, del consumo, del embrutecimiento adosado con gotas de adulaciones cuidadosamente estudiadas para incentivar la dependencia al sistema.
La poesía goza de buena salud, aunque a muchos les pece; aunque la rima esté en desuso; aunque la prosa se expanda por sobre la métrica.

miércoles, 6 de febrero de 2008

Como

Como pan, como si fuera un manjar
inigualable en esta mañana fr´ia
de invierno. Como pan con mis
dientes destrozados; un pan duro que
me dieron en la panader´ia de la
esquina. Un pan de ayer, de antes de
antes de ayer. Un pan tan duro que

el dolor de mis muelas me
hace olvidar el fr´io que por
mis pies sube. Y mi est´omago,
agradecido, a pesar del dolor,
a pesar de lo duro del pan,
de mis muelas y del fr´io.

Como pan como si fuera
lo ´ultimo que comer´e del resto
de mi vida. Como si nada
existiera m´as que este pedazo
de pan, bendita materia que
alivia mi hambre de d´ias, semanas.

Como pan aunque mis manos
no sientan la corteza de la pieza
de pan. Aunque las migas se
mezclen con la mugre de mis
uñas, aunque esta vida perra
me halla castigado duramente.

Y quiz´as por eso como, como si nada
de esto me estuviera pasando,
como si la calle, en esta mañana
helada, no existiera y este que
soy, no estuviera tirado en el umbral
de una casa, esperando a que el
sol caliente mis huesos.

Como pan como si me comiera;
como si lo ´unico que
importara fuera este pan,
a pesar de mis muelas, a
pesar de mis manos, a
pesar de mi mismo.
Como mierda.

miércoles, 2 de enero de 2008

Magdalena

Magdalena sueña
con un lecho de rosas,
pequeña margarita desojada
que creció en la ribera.
Desolada trascendencia
que te arrojó el destino,
mendigando limosnas
para llenar el vacío
de tu vientre gastado
florecen doloros
con olor a ayeres
que reventarán mañanas.
Magdalena sueña
conun lecho de rosas.
El recuerdo te inunda
con madrugadas heladas,
de otoños cubiertos
con hojas de cartón corrugado.
Tu figura delgada entre
tus piernas quebradas
y tu mirada se pierde
en un cielo rojizo.
Magdalena sueña
con un lecho de rosas,
pequeña margarita desojada
que creció en la ribera.
Publicado en el libro "Mosaico de papel"
Autoría: Octavio Fiorelli
otoño 2004